"A las 7,30 el timbre nos llama. A las 7,45 rezamos las oraciones de la mañana y seguidamente meditación dirigida por D.Andrés Aguirre. A las 8,30 tenemos un rato libre y unos momentos después, D.Angel, el nuevo prefecto, celebra su primera misa en la capilla de latinos, con la asistencia de toda la comunidad. Acto seguido ponemos en regla la habitación y vamos a tomar el café con leche y mermelada" (de mi Diario de entonces)
Así empezó el curso. Esto se repetiría con salvedades... El horario de levantarse oscilaba entre las 7/ 7,15 para los días de clase y las 7,20/7,30 para los dias que había algo para celebrar. Es el curso del que mantengo más datos, porque hice un Diario exhaustivo en el que no me perdoné fallar ningún día. Probablemente haré más subidas a este blog con sus datos.
Que éramos los mayores está claro... pero que ejerciamos de ello también lo recuerdo. Empezamos 33, con la sóla incorporación del nuevo "intensivo" José María Aguirre Oraa, que además debía de ser el más joven del curso.
Al nuevo prefecto, Angelorum hasta el año anterior en 4º de Teología para todo el Seminario, teníamos que tratarle de "padre" o de "donangel", lo que en principio al menos a los quinto nos costó... y probablemnte también a él. Recuerdo que un día que nos llevó hasta la Cruz de Zaldiaran, se llegó a remangar la sotana. Pero lo mejor para mi, además del buen día de monte y deporte, fueron las fotos que nos sacó con su extraordinaria cámara. Las mantengo... y las subiré a esta entrada.
Y como lo breve se lee mejor... lo dejo aquí. ¡Pero contaré más de este curso... en el que en el último suspiro nació trampolin!
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